jueves, 28 de julio de 2011

Cero.

Cuatro besos en los puntos cardinales
en el mapa de tu cuerpo dibujando las señales
tres caricias en los angulos distantes
en tus senos, entrepierna, donde encenderte
dos promesas de sangre para consolarme
que harán eterno para siempre este instante
un sueño que vuele entre los mares
que construya puentes y una lo que nos separe
cero, es el imperfecto al que agarrarme
el vacío entre mis manos que desea conservarte

Palabras que florecen en jardines de piedras
lo que siembras es lo que cosechas
Tempestades de tormentas en las miradas
y es que cosechas aquello que siembras

cuatro lágrimas, necesarias para llorarte
humedeciendo las huellas que ayudan a recordarte
tres pesadillas que alargan la noche
convirtiendo en laberinto el camino que andaste
dos mentiras son las únicas que contaste
que el amor no muere y que yo era importante
una caida de bruces entre celos y desmanes
esas dudas que a fuego lento en mi tatuaste
cero, es el imperfecto al que amarrarte
es la nada entre mis brazos que tú dejaste

Palabras que florecen en jardines de piedras
lo que siembras es lo que cosechas
Tempestades de tormentas en las miradas
y es que cosechas aquello que siembras

Palabras que florecen en jardines de piedras
lo que siembras es lo que cosechas
Tempestades de tormentas en las miradas
y es que cosechas aquello que siembras

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