Grito.

 

Un grito desesperado que desgarra los sentidos, un cuchillo largo para cortar los sueños y romper los cristales de tu mirada...

Cruz en Llamas.

Solo existes si te pienso, solo estás presente en el fuego de mis ojos, alimentando las llamas con los leños de la cruz de tus miedos.

Alma Rota.

¿Qué pegamento pega los pedazos de un alma que esta rota y que anda sedienta de cariño y hambrienta de ideas?

Dolor.

Profundamente mis heridas
Dibujan signos extraños
Mientras apuro mis fuerzas
La lucha interna cambió
Mi corriente sanguínea
Mi alma pide ser restaurada
Para poder perseguir el aire
Respuestas que vienen
Preguntas a esas respuestas
Que se arremolinan a mi alrededor
Ando por tierras baldías
Mis pasos son borrados
No hay ningún rastro
Pronto será olvidado este dolor
¿Habré cambiado tras los años?
La esencia siempre permanece
Brotaron de mis dedos hilos de sangre
Sin remedio, empujado a vivir,
Pronto será olvidado este dolor
¿Ahora sabré quien soy?
Nubes que esconderán esos días
Besos que no paliaron este hambre
Pronto será olvidado este dolor.

Gira.

Hay polvorientos caminos…destinos que vienen y van
Mientras indiferente gira el mundo, da vueltas
Hombres…somos tantos; unos nacen, otros morirán
Según la estrella con la que broten y el giro de las ruletas

Tan sólo espero que por una única vez la rueda de la fortuna se paré en la estación que me conviene... Que mi estrella no se convierta en un agujero negro devorando otros mundos, gira mundo, gira, pero recuerda que siempre intentaré ir en contra dirección, es mi destino, es mi sino.

Migajas.

Mi corazón cargado de dolorosos silencios, sólo exclama que necesita un atisbo de cariño...
Creo en el poder del silencio, de los actos que no necesitan de las palabras...
Por eso esos silencios encajados en mi pecho, masacran mi alma con certeros golpes que la atraviesan...
No pido mucho, una mano en mi mejilla, un beso en mi frente, una sonrisa sincera, una mirada de frente y una migaja de cariño.
Tengo tanto frío, ¿querrás ser tu mi abrigo?...

Amor.

El amor, nos hace sentir confusos, enreda nuestros pensamientos, nos vuelve ilógicos, nos anula la voluntad muchas veces, nos hace egoistas e incluso nos vuelve obsesos, en definitiva, nos convierte en seres irracionales muchisimas veces... Si borraramos el amor de nuestro interior, tal vez, así, tendríamos un poco tranquilidad, algo de paz o un poco de sosiego; pero si borramos de raiz al amor desde dentro, no seríamos más que habitaciones destartaladas, sin habitantes, sin muebles, en ruinas, seríamos seres vacíos, almas errantes, nulos entes vivientes sin camino definido... Bendito y maldito amor que nos hace humanos, que nos convierte en ángeles y demonios a la vez, enfrentados con nosotros mismos, que nos pone en la boca el sabor del dolor y del placer, que nos convierte en vencedores y derrotados a un mismo tiempo, que nos hiere y cura esa misma herida en un sólo instante...